Belako cierra 'Plastic drama' en Aia antes de volver al estudio

El 2022 de Belako ha terminado con lo que más disfrutan: hacer conciertos. A principios de diciembre despidieron un tour que durante casi un mes les ha llevado a recorrer por primera vez ciudades por todo el norte de Europa, desde Alemania a Francia, Dinamarca, Polonia o Finlandia. Antes hicieron lo propio por México, EE UU e Inglaterra, así como por diversos festivales entre los que destaca su tercera participación en el Sonorama de Aranda de Duero.

Un largo camino el de las diez canciones de 'Plastic Drama', con las que habían regresado al rock guitarrero y más enfocado al directo, después de sus incursiones previas con la electrónica. Pero fue con la reedición del álbum 'Plastic Drama-Deluxe Edition', publicada a comienzos del mes de abril del pasado 2022, cuando decidieron vestir esos mismos temas con el atuendo electrónico.

Es así como nació una suerte de 'Cara B' compuesta por remezclas de los temas originales encargados a artistas como Joel Dilla (batería de Wolf Alice), Crystal Fighters, el dúo Delaporte o el cuarteto Hinds, entre otros. Mucho sintetizador, bombo, reggaeton, house y autotune para darle un nuevo vuelo y que «no cayese en el olvido por el hecho de haber salido en 2020», como aseguraba su vocalista Cris Lizarraga en una entrevista reciente.

El de mañana en la cumbre de Pagoeta cerrará un capítulo de dos largos años, para embarcarse desde este mismo mes de enero en la grabación de su próximo álbum y del que nada aún han podido adelantar. Lo que sí se ha dado a conocer es que este 2023 ya les depara actuaciones en importantes festivales como son el FIB de de Benicàssim y el Mad Cool en Madrid.