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Martin Sansinenea
San Sebastián
Lunes, 26 de agosto 2024, 23:47
Las sociedades europeas son las que, por lo general, presentan una mayor cohesión y una menor desigualdad entre sus ciudadanos, y dentro de ellas Gipuzkoa ... está en punta de lanza. Y es que, según el índice Gini que mide este parámetro, Gipuzkoa presenta la segunda tasa de desigualdad más baja de Europa, con una puntuación de 23, solo superada por Eslovaquia. El coeficiente Gini, desarrollado por el estadístico italiano Corrado Gini en 1912, es un procedimiento analítico empleado para medir la concentración de ingresos entre los habitantes de una región en un periodo de tiempo determinado. Y en su última edición, de 2022, ha otorgado un 23 a nuestro territorio. De cero a cien, cuanto mayor sea el valor mostrado en el índice, mayor será la desigualdad entre habitantes. Es decir, un coeficiente de 0 significa que todas las personas comparadas tienen el mismo nivel de ingresos o riqueza. Mientras que un valor de 100 se traduce en que una persona recibe todos los ingresos o riqueza y los demás no reciben nada.
Según el último informe, al que ha tenido este diario, solo Eslovaquia (21,2) obtiene una mejor 'calificación' que el territorio guipuzcoano. Este país sigue al frente, al igual que en la anterior edición del informe, en 2018, y Gipuzkoa mejora, ya que entonces obtuvo una 'nota' de 25,3. Dicha calificación posicionó a nuestro territorio en octava posición del ránking. En 2014, el territorio obtuvo una 'calificación' de 26,3. Por lo tanto, se puede afirmar que la desigualdad entre habitantes ha descendido año tras año en la última década, si atendemos al índice Gini. En lo relativo a la Comunidad Autónoma Vasca en su conjunto ha obtenido ahora una 'calificación de 26,9.
Precisamente en comparación a Euskadi, Gipuzkoa ya recibió una mejor calificación en 2018, ya que el País Vasco sacó un 26,7, más de un punto peor que el territorio guipuzcoano. Cabe destacar que Gipuzkoa ha descendido su desigualdad en 2,3 puntos respecto a 2018. Para poner en contexto este dato habría que compararlo con países que son considerados potencias europeas. Por ejemplo, Alemania, en 2018 obtuvo una 'nota' de 30,9 mientras que en 2022 consiguió descender 2,1 puntos su índice hasta los 28,8.
Pero Gipuzkoa no solamente se encuentra por delante de la locomotora económica europea. Países como Francia, por su parte, han empeorado en el ránking, pasando del 29,3 de 2018 al 29,8 de 2022. En esta línea, Italia, uno de los clientes principales de la industria guipuzcoana, marca tasa del 32,7 en el índice, descendiendo en solo dos décimas sus resultados de 2018. De hecho, el país transalpino no consigue que la diferencia económica entre habitantes se reduzca. No obstante, su posición en la tabla es baja, y es superada por países como Rumania o Grecia.
En comparación con el conjunto del Estado, por su parte, Gipuzkoa se ubica casi 10 puntos por delante. En concreto, España se ubica en la parte baja de la tabla, con una 'nota' de 32. Una cifra, eso sí, que mejora su resultado del índice Gini de 2018 cuando obtuvo una calificación de 33.
En cuanto a los países que se encuentran en una peor posición en el índice, no hay muchos cambios respecto a 2018, compuesto por Bulgaria con un 39,7, Letonia, 35,7 y Lituania con un 35,4. De hecho, los tres países ocupan las tres últimas plazas del ránking de 2022, aunque en distinto orden. En este caso Bulgaria repitió la última posición con un 38,4 mientras que Lituania y Letonia se quedaron con un 36,2 y 34,3 respectivamente.
Además de la desigualdad calculada a partir del índice Gini, otro termómetro de la situación económica y social de un país es el desempleo. En esta faceta cabe destacar que Gipuzkoa ostenta un lugar de privilegio entre los países de la Unión Europea con los que se ha comparado. Y es que el territorio guipuzcoano marcó una tasa de paro del 6,9% durante 2022, según ha destacado recientemente la Diputación foral en un informe. Se queda cerca, por ejemplo, del motor europeo Alemania, que registró una tasa de desempleo del 4,5% (pleno empleo). Sin embargo, la cifra de Gipuzkoa se equipara a los países escandinavos, que suelen usarse como ejemplo de desarrollo social. Y si se compara con países como Suecia o Finlandia, deja entrever una situación económica fuerte. Ambos países nórdicos anotaron una tasa de paro del 7,5% y 6,8% respectivamente. Una diferencia de apenas una décima con el país finlandés, mientras que aventajó en más de medio punto al país sueco.
Euskadi, por su parte, se mantuvo durante 2022 en una tasa de desempleo de un 8,5%, más de un punto y medio por encima de Gipuzkoa. En cuanto a la tasa de paro de los jóvenes menores de 25 años, el país germano, como es de costumbre, aventajó a los demás países y también a Gipuzkoa. La tasa de paro en esta franja en el territorio fue de un 14,20%, muy lejos de los 6 puntos de Alemania, país donde las jóvenes encuentran empleo con más facilidad. No obstante, Gipuzkoa tiene menos paro juvenil que la Comunidad Autónoma del País Vasco, con una tasa de un 25,93%, más de once puntos.
En cuanto a los países de la Unión Europea como Suecia, Gipuzkoa puede mirarles a los ojos en este aspecto, ya que Suecia, por ejemplo, tuvo una tasa de desempleo juvenil del 16,20%, mientras que Finlandia se anotó un 14,20%, exactamente igual que Gipuzkoa.
Reducir la desigualdad ha sido precisamente una de las tareas que desde la Hacienda guipuzcoana se ha intentado llevar a cabo durante los últimos años bajo el mando del recientemente fallecido Jokin Perona, empeñado en una política fiscal que tuviera como objetivo que la redistribución de la riqueza reforzara los servicios y ayudas sociales.
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