Elhuyar, 50 años innovando desde el euskera

Parecía difícil, pero lo consiguieron, porque el ejercicio no distaba demasiado de lo que hacen todos los días: aunar bajo una única marca y con una filosofía común todos los ámbitos en los que desarrollan sus proyectos. Jon Abril Olaetxea, vinculado a Elhuyar desde hace una década y director general desde 2019, tiene claro cuál es nexo principal: «Nuestro lema es 'Ezagutuz aldatzea', y creo que se apuesta por el conocimiento para el cambio social es lo que aglutina todas las facetas de Elhuyar».

Es probable que para muchos el nombre de Elhuyar –uno de los frutos que dio la sociedad vasca en 1972, junto con Udako Euskal Unibertsitatea/UEU y Elkar–, siga vinculado al legendario diccionario que, pese al declive de las ventas de la versión en papel, mantienen permanentemente actualizado en la web. No obstante, en 50 años han recorrido un camino que les está llevando lejos en ámbitos muy diversos.

«Aplicamos el conocimiento avanzado en cuatro áreas de trabajo principales: el relacionado con la igualdad, la participación y el cambio social; la educación y la socialización y divulgación de la ciencia; la asesoría y la planificación lingüística y, finalmente, la inteligencia artificial y la ingeniería lingüística», detalla Abril, precisando que «en el ámbito de la inteligencia artificial tenemos investigación propia, pero en el resto se trata más de difundir y utilizar el conocimiento ya existente para poner en marcha nuevos proyectos».

En todos los casos, el objetivo de una entidad que nació como asociación cultural y en 2002 se convirtió en una fundación cuyo Patronato preside actualmente Txema Pitarke de la Torre, director de Nanogune, es «responder a las necesidades y los retos que advertimos en la sociedad vasca, y hacerlo desde el euskera. Aunque trabajamos también en otras lenguas, todos los proyectos están pensados desde el euskera».

Jon Abril ite que contar con una «red de colaboración muy amplia y heterogénea» les ayuda mucho a escuchar y detectar esas necesidades y a darles una respuesta adecuada. En esa red «están los agentes de euskalgintza, de la que formamos parte, pero también las istraciones –dos consejerías del Gobierno Vasco y la Diputación forman parte del Patronato–, universidades, centros de investigación, empresas...».

Esas conexiones les permiten «tomar constantemente el pulso a la sociedad» y tratar de adelantarse a sus necesidades, así como «ir probando las nuevas propuestas. Ahí vemos si determinada tecnología está suficientemente madura, si es la adecuada, si hay que darle otra vuelta...».

Con motivo del 50 aniversario, esa red se ha ampliado porque, como subraya Abril, «nos ha ayudado a llegar a agentes que antes estaban más lejos de nosotros, sobre todo dentro de la comunidad que tiene menos relación con el euskera, o a empresas, sobre todo industriales, con las que no teníamos mucha relación».

En cualquier caso, los retos que anticipan para las próximas décadas con el lema 'Elhuyar, 50 años más adelante' son comunes a todos. Por ejemplo, la emergencia climática, en la que «desde la perspectiva de la ciencia creemos que hay mucho trabajo que hacer, porque en estos tiempos de desinformación y de sobreinformación es imprescindible formar entre todos ciudadanos críticos y con opinión propia».

Seguir desarrollando proyectos para que «la tecnología no quede solo en manos de los grandes. Algo fundamental para lenguas pequeñas como el euskera y para evitar que la brecha digital en lugar de reducirse se agrande» es otra de las prioridades, así como hacerlo «entre todos, ampliando y reforzando la red, y manteniendo la manera de hacer las cosas que responde a nuestra filosofía y a nuestra naturaleza».