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El Colectivo de Víctimas del Terrorismo, Covite, ha criticado duramente la emisión este lunes en ETB, del documental 'Euskal Herria eta Askatasuna, bakerako bide luzea' (Euskal Herria y Libertad, un largo camino hacia la paz) por poner a la televisión pública vasca «al servicio de los intereses de la izquierda abertzale y del blanqueamiento y el enaltecimiento de ETA». El documental dirigido por Thomas Lacoste fue retransmitido también por el canal público francés FR3 el 27 de abril.
En una nota enviada a los medios de comunicación, la presidenta del colectivo, Consuelo Ordóñez, denuncia que con la emisión de la cinta EiTB es «impropia» de un medio de comunicación público sufragados por todos los ciudadanos y que ha puesto «en manos de los defensores del blanqueamiento y el enaltecimiento de la trayectoria criminal de ETA».
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La hermana de Gregorio Ordóñez, el concejal del PP en el Ayuntamiento de Donostia asesinado hace 25 años por la banda terrorista, subraya que el documental «asume sin ambages los postulados de la izquierda abertzale de que ETA merece un reconocimiento público por sus supuestos esfuerzos a favor de la paz y que evita la deslegitimación del terrorismo».
Covite acusa a la televisión pública vasca de incumplir el artículo 4 de la Ley vasca 4/2008 de reconocimiento y reparación a las víctimas del terrorismo, que «obliga a las instituciones a prevenir los actos que ensalcen el terrorismo o humillen a las víctimas».
En cuanto al contenido del documental, Ordoñez denuncia también las «múltiples falsedades que se presentan», entre ellas que se afirma que «ETA representa al 'pueblo vasco'» o aseveraciones como que «los franquistas fueron más violentos en el País Vasco que en otros lugares de España; que el franquismo y la guerra civil española fueron estrategias contra los vascos; que la historiografía española no reconoce que el franquismo fue una dictadura; que los gobiernos españoles nunca quisieron negociar con ETA y que los españoles no habrían logrado romper sus lazos con el régimen franquista».
Covite subraya que en el trabajo dirigido por Lacoste no se hace ninguna referencia a las víctimas de la organización terrorista, ni a los «miles de exiliados forzosos del País Vasco por culpa de las campañas de acoso y persecución de ETA y sus colaboradores»; y evitan referencia sobre los presos de ETA que han optado por la vía de la reinserción ni los que abandonaron la organización por su rechazo a la violencia». A los que sí se alude y resulta «especialmente humillante» es «a sanguinarios etarras como 'Josu Ternera'«, al que se presenta como »un incansable luchador en favor de la paz« y una figura política ejemplar», lo que supone «un ataque frontal y directo a los valores de cualquier democracia consolidada. No cabe disociar la democracia de los valores éticos más básicos».
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