Borrar

«La amnistía tiene que tener una mirada profunda y que no sólo beneficie a la elección de un presidente»

El lehendakari ha negado que fuera «mediador» y ha recordado que pidió sin éxito al entonces secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que no apoyase la aplicación del artículo 155 de la Constitución

Javier Roldán Moré

San Sebastián

Miércoles, 4 de octubre 2023, 13:11

El lehendakari Iñigo Urkullu habló de Cataluña y afrontó de lleno dos de las cuestiones que están en el centro del debate político en los prolegómenos de la investidura de Pedro Sánchez: la amnistía y el referéndum. Urkullu recordó que actuó de 'facilitador' en el conflicto catalán de 2017 -a petición de un grupo de empresarios- que terminó con un traumático final, con la declaración unilateral de la independencia, la fuga de Carles Puigdemont y la detención de los de la Generalitat y la aplicación del artículo 155.

En relación a la posible amnistía que el Gobierno Sánchez pueda preparar para conseguir de los catalanes su apoyo a la investidura, Urkullu consideró que el planteamiento de la misma «tiene que tener la premisa de intentar revertir políticamente en la medida de lo posible lo sucedido en octubre del año 2017», algo, que según precisó, «resulta muy difícil, sino imposible en algunos casos», e insistió en la fórmula del «diálogo, la negociación y la voluntad de acuerdo».

Urkullu quiso dejar claro lo que políticamente debería acompañar a la amnistía. «Tiene que tener la premisa de mirar retrospectivamente lo que sucedió y que nunca debió ser judicializado este conflicto». El jefe del Ejecutivo vasco reiteró en que esa amnistía debe tener «una mirada mucho más profunda, de largo recorrido, no solamente lo que pueda beneficiar la posición de algunos representantes políticos para la elección de presidente del Gobierno».

«Desde el respeto a los marcos legales hay modelos a explorar como el del Reino Unido o el de la ley de Claridad de Canadá»

Asimismo, recordó que «llegará el momento también de abordar otras leyes, como la ley de Enjuiciamiento Criminal o la ley del Código Penal, no solamente la ley de amnistía», en alusión a los encasuados por el procés .

¿Y sobre el referéndum en Cataluña? Sobre esta cuestión el lehendakari puso por delante su teoría que en anteriores ocasiones ya ha esgrimido. «Hay recorrido en la interpretación de la Constitución española» para «la delegación de la organización de consultas o bien para la celebración de consultas pactadas».

«Creo que hay caminos en los que, si se quiere ejercitar la política con voluntad de acuerdo desde el respeto a los marcos legales, hay caminos para facilitar que se explore», subrayó Urkullu, quien hizo referencia a los modelos de Reino Unido o la Ley de Claridad de Canadá, y al mismo tiempo apeló a realizar un ejercicio de «pedagogía de las consecuencias de los proyectos o de los planteamientos que se quieran hacer a la sociedad sometidos a consulta».

Preguntado por si en este momento volvería a ejercer de «facilitador» en Cataluña, tal como lo hizo hace seis años, señaló que no tiene «problema en hacer ese ejercicio», aunque no cree que sea «el momento ni el papel».

La actualidad se iba adentrando a la investidura de Sánchez y, a la pregunta de si daría su apoyo, afirmó que «más que generosidad» es necesaria la «responsabilidad y corresponsabilidad» ante la situación política, económica, y social en el Estado, para poder ofrecer «certidumbres» con el objetivo de la «estabilidad».

Convención constitucional

Sobre la convención constitucional que planteó a finales del mes de agosto en lo que supuso un adelantado inicio del curso político, Urkullu recordó que ya lo hizo hace cinco años, pero «aquello no tuvo recorrido». Además, se preguntó si «¿es posible hoy hacer un planteamiento que tenga como consecuencia ineludible la reforma de la Constitución?». «Yo creo que no», respondió, para añadir que «uno puede plantear la confederación o el federalismo asimétrico, pero todo esto lleva a la necesaria reforma de la Constitución, y ello es imposible». Urkullu, de esta manera, dejó al descubierto la dificultad en abordar cualquier reforma constitucional en el flanco territorial, ya que ésta debe estar avalada por las tres cuartas partes del Congreso, y eso conlleva ría el obligado respaldo del PP a este tipo de iniciativas.

«¿Qué nos queda si queremos realmente abordar esa reflexión sobre el modelo territorial o el modelo de Estado?», cuestionó el lehendakari Urkullu, para insistir en que «un débito que tiene en este momento, 44 años después, el Estado español es cerrar el modelo de Estado, el modelo territorial».

Ya en el ámbito vasco, el lehendakari exigió una vez más el cumplimiento íntegro del Estatuto y recordó que cinco materias que «el propio Gobierno Sánchez había puesto sobre la mesa» siguen pendientes de ser transferidas, así como la constitución de una comisión bilateral de cooperación entre el Ejecutivo central y las instituciones vascas».

«Estamos en octubre del año 2023, un año y un mes más tarde, y está sin activar. Hemos propuesto, además de las cinco materias y además de la materia ofrecida por el propio Gobierno español, otras cuatro materias. No hay respuesta», se lamentó el lehendakari.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco «La amnistía tiene que tener una mirada profunda y que no sólo beneficie a la elección de un presidente»

«La amnistía tiene que tener una mirada profunda y que no sólo beneficie a la elección de un presidente»