Jesús Calleja: «Vamos a viajar más personas con emisiones mucho menores»

Aun espíritu viajero como Jesús Calleja solo le podíamos coger recién bajado de un avión. Y así fue: nada más llegar de Laponia, este leonés de 55 años atendió nuestra llamada. Pocos como él para hablar de una vida en tránsito y del turismo, de cómo está el mundo y de cómo va a estar dentro de unas décadas. Ha recorrido medio planeta y tiene claro que el porvenir será natural, sostenible y responsable.

- Lleva usted muchos años de un sitio a otro. ¿Cuánto y cómo han cambiado los viajes desde que empezó a recorrer el mundo?

- A los 18 años decidí salir a conocerlo. Entonces se viajaba con un boleto de avión que entregabas en un mostrador. En muchos países no había ordenadores. Si tenías el billete volabas; si no, no. Me iba a recorrer las montañas de Nepal y si estaba dos o tres meses fuera, en mi casa nadie sabía nada de mí. No había flujo de información, no había mecanismos para contar tus experiencias. Ahora volamos con una reserva online, hay una frecuencia de vuelos estupenda y puedes contar el viaje en directo.

- ¿Y mañana?

- Algún día aprenderemos a gestionar las redes sociales. Creo que aún no lo hacemos bien porque hay gente que ve el mundo a través de una pantalla. La modernidad nos ha traído el conocimiento mucho más rápido, pero vemos el mundo más deprisa y no lo vemos de una forma real. Con el smartphone hemos ganado en muchas cosas, pero estamos perdiendo la interacción con la gente local.

- ¿Vamos, por tanto, hacia unas vacaciones en 'streaming'?

- Ha aparecido una tecnología brutal como internet y los 'smartphones' y esto va a seguir evolucionando en esa línea. Ahora estamos en una vorágine sin control, pero en algún momento aprenderemos a controlar esas herramientas. Cuando lo hagamos, volveremos a disfrutar de esa parte del viaje que ahora nos estamos perdiendo.

- ¿Se democratizarán más los viajes?

- Queda mucho recorrido por delante. Cuando empecé a viajar, los vuelos 'low cost' no aparecían ni en nuestro imaginario y ahora vuelo por 30 euros a Londres. Se seguirá reinventando el viaje. Debería reglamentarse el derecho a viajar porque es una fuente de conocimiento, de descanso, de reseteo. Ayuda a que los ciudadanos sean felices. El viaje es para mí un argumento de progreso de un país. No está sólo en cuánto gana la gente, sino en qué nivel de felicidad tiene y viajar da felicidad.

- ¿El turismo del futuro será verde o no será?

- Está costando concienciar al colectivo: es decir, no basta con que los países pongan normas. Los ciudadanos nos tenemos que creer que es real lo que está ocurriendo y que tenemos que poner todo de nuestra parte para revertir la situación. Determinados lugares tienen que soportar una carga turística muy potente y ya se están poniendo unas normas. En el Everest hay que pagar una fianza de 10.000 dólares. Tienes que contabilizar qué llevas y devolver los envases a la vuelta. Estamos inculcando que hay que cuidar el planeta y el turismo va a evolucionar para ser mucho más sostenible.

- …

- Ya se demanda. La gente cada vez está más concienciada y podemos tener un turismo de muchísima más calidad. Lo podemos hacer y lo vamos a hacer. El que se suba al carro del turismo sostenible es el que va a funcionar y el que no lo haga va a fracasar.

- ¿Cómo influirá que países superpoblados como China o India desarrollen una clase media con capacidad para viajar?

- En ese momento nosotros tendremos mucha más conciencia de cómo debemos viajar. Ningún país va a autorizar un viaje desmedido o alocado o que deje un lugar hecho un rastrojo. Habrá unas medidas que todo el mundo tendrá que cumplir.

- …

- Pasará también en el transporte. Un motor de avión ahora emite 20 veces menos de partículas contaminantes que hace 20 años. Airbus y Boeing anuncian el hidrógeno en la aviación. Tendremos aviones mucho más sostenibles. Se moverán muchas más personas con emisiones mucho menores.

- ¿Cómo serán los destinos?

- Seguro que se fomenta el turismo de interior. Hemos redescubierto que viajar por España mola. Los pueblos se van a empezar a poner de moda. Esa España se va a poner de moda y va a tener un turismo emergente.

- ¿Y qué zona del mundo emergerá como destino turístico?

- Creo que Asia tiene un atractivo enorme. Países como India acabarán ofreciendo un turismo acorde a lo que tienen. Tienen de todo: paisaje, cultura, gente, puedes viajar barato, a todo lujo... Tiene muchas posibilidades.

- ¿El turismo natural le ganará la partida al urbano?

- Sin duda. Nada que haya construido el hombre puede darte una satisfacción, arrancarte una sonrisa o hacerte encoger de hombros como lo hace la grandeza de la Naturaleza. Eso no lo da ninguna ciudad ni ningún artificio. Cuando comprendamos ese turismo, el natural va a tener un éxito abrumador..