El Giro engulle a Roglic y Ayuso

La primera etapa de alta montaña causa estragos: el esloveno abandona, el de Jávea pierde un cuarto de hora y Del Toro salva la maglia rosa por la mínima

Iñaki Izquierdo

Miércoles, 28 de mayo 2025, 06:51

La gente solo se acuerda de Santa Bárbara cuando truena, pero a Juan Ayuso (UAE) no se le olvidará el nombre de la patrona de ... los artilleros, llueva o haga sol. En las rampas de la montaña de ese nombre, en el Trentino de los Moser, Simoni y otros tantos campeones, se le escapó su sueño. El Giro de Italia, que cumpe 108 ediciones y ha medido a todos los grandes, se lo tragó. Faltaba un mundo a meta y el de Jávea perdió un cuarto de hora, una minutada de otra época. Tras quince etapas pacíficas, la corsa rosa mostró ayer su cara salvaje: engulló a la gran perla alicantina, 22 años de futuro esplendoroso, y también al gran senador de la carrera: Primoz Roglic (Red Bull-Bora), de 35. En un día, la carrera se queda sin sus dos grandes favoritos. El esloveno, que no se retiró el domingo porque un campeón respeta a la carrera, volvió a caerse y esta vez dijo basta.

Abandonó antes del zafarrancho, que también zarandeó al líder, Isaac del Toro (UAE), la imagen de la frescura y la exuberancia los días pasados. El mexicano probó la ley de la alta montaña y fue descolgado por todos. En 200 kilómetros, el todopoderoso UAE fue desarbolado y queda colgado del clavo ardiendo al que se agarra el fenómeno de Nueva California. Dos cazadores de primera, Simon Yates (Visma) y Carapaz (EF), le acechan a medio minuto.

El Giro comienza de nuevo y Ernesto Colnago toma café tranquilo en su casa de Cambiago. Cuando Del Toro regalaba fuegos artificales y Ayuso esperaba para dar su golpe maestro, el fabricante de las bicis del UAE no bajó al taller a por el bote de pintura rosa para el desfile triunfal de Roma el domingo. A sus 93 años, ha visto a todos los gigantes y ha fabricado bicicletas para muchos de ellos, empezando por Merckx. Empezó con Fiorenzo Magni y la lista es interminable: Nencini, Saronni, Rominger, Bettini... y, por supuesto, Pogacar, que le dio el Tour. No es nostálgico, le gusta que ganen los jóvenes y le gusta que sus bicis sean las más modernas, las mejores y las más bonitas. Se emociona con Ayuso y con Del Toro. Ha ganado y ha perdido, conoce cómo funcionan el ciclismo y los negocios.

El café de su casa, recién hecho en una cafetera Bialetti, otro de esos nombres del milagro industrial italiano. Colnago vendió su firma a los árabes y los Bialetti acaban de vender la suya a los chinos. Dos italianos cruzan de la mano la meta de San Valentino: Christian Scaroni y Lorenzo Fortunato (Astana). los dos montan bicis de la marca XDS, china. No hay equipos italianos en el World Tour. Nada es como antes.

Carapaz fue el mejor de los líderes de la general y sube al tercer puesto, gracias a su ataque en la última subida, el que desarboló a Del Toro. Ganador del Giro en 2019, el ecuatoriano presenta su candidatura. A Simon Yates le costó un poco más reaccionar, pero es segundo a 26 segundos. El inglés perdió el Giro de 2018 en La Finestre, que se subirá en la penúltima etapa. Aquel día iba de rosa y se dejó 39 minutos. Sabe lo que queda por delante.

Scaroni y Fortunato culminaron una escapada en la que también fueron protagonistas Xabier Mikel Azparren (Q36.5), Pello Bilbao (Bahrain) y Jon Barrenetxea (Movistar). El donostiarra está mostrando su mejor nivel, con presencia en carrera.

El Giro mostró ayer su fiereza y hoy esperan Tonale y Mortirolo entre San Michelle All'Adige y Bormio. Café recién hecho y a ver.