De las 358.000 compraventas de viviendas que se llevaron a cabo en 2024, 139.100 las realizaron extranjeros, un 10% más que el ... año anterior. Esto, inevitablemente, ha tirado al alza de los precios. De hecho, el coste medio de una vivienda comprada por clientes extranjeros subió un 8,6% en 2024 hasta los 2.362 euros por metro cuadrado (euros/m2), mientras que en las adquiridas por nacionales se quedó en los 1.713 euros por metro cuadrado.
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Comunidad Valenciana (41.400 compraventas), Andalucía (25.500) y Cataluña (21.500) fueron las tres regiones en las que los extranjeros más invirtieron en vivienda en 2024, según los datos del Consejo General del Notariado.
Además de Madrid, donde el precio de la vivienda se ha disparado un 60% en términos reales en los últimos diez años, es en las zonas más turísticas del país donde los precios están más tensionados. Los datos detallados esta semana por el Banco de España confirman que Baleares, Cataluña, Andalucía y Canarias son las cuatro comunidades donde más ha subido la vivienda, en todas con incrementos superiores al 38% desde 2014, sin tener en cuenta la inflación. Una de las causas identificadas por el Banco de España es que más de la mitad de las viviendas en estas zonas están en manos de extranjeros, por lo que el uso es turístico.
En detalle, los archipiélagos han perdido más del 50% de su capacidad residencial. En otras regiones muy turísticas como Málaga la pérdida ronda el 40% y en Alicante, el 35%. Desde el Ministerio de Consumo, responsables del buen funcionamiento de las plataformas digitales, han obligado a Airbnb a eliminar más de 65.000 anuncios ilegales de su 'app' y confirman que el gran auge de las plataformas de alquiler turístico está tirando al alza de los precios en toda España, pero con mayor intensidad en Madrid, Barcelona, litoral mediterráneo y ambos archipiélagos. «Hay miles de viviendas fuera del alcance de las familias por la tensión de los precios de la vivienda por los alquileres turísticos», reitera el ministro Pablo Bustinduy cada vez que tiene ocasión.
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En comparación con 2023, las compras de viviendas por parte de extranjeros aumentaron especialmente entre polacos (casi un 44% más operaciones que hace un año), chinos (+26,5%) y ucranianos (+26,3%). También destacaron los incrementos de holandeses (+26%) y colombianos (+23,4%). En cambio, se redujeron las compras de rusos (-10,6%), ses (-2,0%) y británicos (-1,7%).
Al haber zonas con mucha más demanda de vivienda que otras, el encarecimiento se concentra en las zonas más tensionadas. Y no parece que la situación vaya a mejorar en 2025. Los primeros indicadores apuntan a incrementos cercanos al 10% en los precios de la vivienda del primer trimestre. El déficit actual entre oferta y demanda alcanza las 550.000 viviendas, según reconoce el propio Banco de España. El hasta ahora director de Economía del supervisor, Ángel Gavilán, apuntó la semana pasada durante la presentación del informe anual que pasarán «varios años» hasta que este 'gap' pueda reducirse.
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El supervisor explica que el desequilibrio entre oferta y demanda de vivienda «contribuye al deterioro de la accesibilidad», cuya intensidad es mayor entre los jóvenes en las áreas geográficas donde se concentra la actividad económica, indican. Y, una vez más, este desequilibrio no se reparte equitativamente, sino que se concentra en cinco provincias, según el Banco de España: Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante y Málaga.
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