Los trabajadores de TS Fundiciones se encierran en la planta de Arrona

Los trabajadoras de  TS Fundiciones de Zestoa han inicado a primeras horas de la mañana de este martes un encierro en las intalaciones de la empresa en defensa de sus puestos de trabajo. La plantilla ha ignorado la prohibición que tenían de acceder a las instalaciones.

La medida de presión se produce después que procedimiento para el despido de los 150 empelados de TS  haya sido presentado en el juzgado.

La empresa TS Fundiciones de Zestoa presentó un expediente de regulación de empleo el pasado 7 de enero, justo después del Día de Reyes, que contemplaba el despido de 50 trabajadores y un ERE temporal para otros 48 empleados sobre una plantilla que se eleva a 156 personas. Pero el expediente, que no contaba con acuerdo de la parte social, derivó finalmente en una solicitud de liquidación de la empresa por parte del concursal precisamente cuando estaba en el periodo de consultas.

La dirección de la compañía arguyó «la imposibilidad de alcanzar un acuerdo con los trabajadores» para justificar la solicitud de la liquidación. En su opinión, «tras meses de búsqueda de soluciones, declaración del concurso de acreedores y toda serie de actuaciones que se han puesto en marcha», la falta de acuerdo no dejaba resquicio de esperanza ni futuro. Sin embargo, los empleados consideran que la empresa es viable y achacan su evolución a la «mala gestión y al conflicto accionarial surgido hace varios años».

La última palabra la tendrá el juez concursal, pero en caso de que lo ita el ERE conllevará el despido de los 156 empleados. Una cifra nada desdeñable que en cuanto se apruebe elevará de forma considerable los datos de afectados por expedientes de rescisión.

No serán los únicos en una comarca fuertemente castigada por la crisis, tras el cierre de Corrugados Azpeitia y el despido de 38 empleados en la planta de Lasao el año pasado. La quiebra de Fagor Electrodomésticos ha arrastrado a otra empresa emblemática de la zona, Grumal. El concursal de la cooperativa ha presentado también un ERE de rescisión para los asalariados de Grumal (140) y Fagor (80), además de los de Edesa en Basauri (80).

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