El sueldo de los universitarios vascos alcanza los 1.751 euros a los tres años de acabar los estudios

El estudio aborda los salarios que perciben los graduados que han encontrado un empleo a los tres años de su titulación. Una cuestión que está candente tras las últimas declaraciones del exlehendakari, Iñigo Urkullu, reclamando que se elevara el sueldo a los jóvenes para evitar la fuga a otros países, retener y atraer talento y de ese modo tener unas condiciones dignas para que puedan encarar un proyecto de vida. Una afirmación que ha reiterado en diversas ocasiones en los dos últimos meses y que ha levantado ampollas en el mundo empresarial, que defiende que en Euskadi se abonan buenos salarios, muy por encima de la media estatal.

Este jueves, la presidenta de Confebask, Tamara Yagüe, recordó que en los empleos demandados principalmente por las empresas los jóvenes procedentes de FP o de grado universitario cobran, tras dos años, «una media de 1.400 euros netos por 14 pagas y 1.700 euros», respectivamente, una cifra que aumenta en grados industriales».

Unos datos que concuerdan con los que arroja la encuesta de Lanbide en lo que respecta a los universitarios.

El estudio revela que los sueldos medios de los graduados a jornada completa eran a finales del año pasado esos 1.751 euros netos por catorce pagas. En el caso de las mujeres se reduce a 1.693 euros, mientras que en el de los hombres llega a los 1.820 euros, con un incremento medio de 74 euros para las féminas y de 79 euros para los hombres, con lo que la brecha salarial sigue existiendo, aunque las diferencias de incremento por sexo son casi inapreciables, según destaca Lanbide.

Todos los campos, salvo humanidades, incrementan el salario medio, con salud a la cabeza (1.955 euros netos), seguida por las técnicas (1.902 euros). Ambas logran avances por encima de la media. Por debajo del salario medio están los estudios económico-jurídicos (1.686 euros), humanidades (1.624 euros) y Sociales (1.616 euros) y sin variaciones apreciables respecto a cifras anteriores. Las experimentales registran un incremento significativo de 90 euros, pero siguen siendo los que perciben un salario más bajo (1.587 euros).

Estos son los sueldos medios de las tres universidades vascas. Pero si observamos el salario que perciben a los tres años dependiendo de dónde hayan cursado sus estudios, las diferencias son muy pequeñas. Así, el salario medio de los graduados de la Universidad de Mondragon se sitúa en 1.761 euros netos, un euro más que los procedentes de la UPV/EHU, mientras que los de Deusto perciben 1.707 euros.

Pero el estudio también aborda otro cuestión candente, como es el encaje que tienen los estudios universitarios en los puestos de trabajo. En pleno debate sobre las dificultades que tienen las empresas para lograr los perfiles que demandan y la necesidad de adecuar los estudios a esos requerimientos que reclaman las asociaciones empresariales, Tamara Yagüe advirtió que el 25% de los jóvenes que cursan Formación Profesional y el 55% de los que estudian grados universitarios eligen «formaciones que están alejadas de lo que las empresas necesitan», por lo que «hay que trabajar en esa orientación profesional también».

Al respecto, la encuesta arroja un dato revelador y es el del porcentaje de graduados que logran un empleo acorde a su capacitación profesional (encajado). Y el resultado es que el 88% de los alumnos que terminaron sus estudios en las facultadas vascas en 2020 logran a los tres años un empleo encajado, lo que supone un 2% más que la promoción anterior. Un dato que demuestra, según destaca Lanbide, que a mayor formación, más posibilidades de encontrar un trabajo y, sobre todo, de encajar en los niveles más altos de las ocupaciones. El porcentaje de los que consiguen un empleo relacionado y plenamente ajustado a sus estudios de grado se reduce algo y baja hasta el 76%.

Si atendemos únicamente a la empleabilidad, las carreras técnicas, con un 93% y un incremento del 2%, vuelven a ser las que arrojan un mejor resultado. Les siguen las experimentales, con un 89% y un avance de ocho puntos, lo que le permite adelantar a las de salud (88%). Los grados de económico-jurídicas (87%) y Sociales (80%) mejoran también la tasa de empleo en cuatro y dos puntos, respectivamente.

En lo que respecta a la tasa de paro, se sitúa en el 8%, mejorando en dos y cinco puntos las cifras de hace uno y dos años, respectivamente. Se trata del mejor dato de la última década, solo alcanzado en 2018. En el caso de las mujeres la tasa mejora en dos y cuatro puntos y se sitúa en el 9%.

A ello se añade que el 61% del empleo de estos graduados es estable, lo que supone el mejor dato en la serie histórica tras registrar un avance de 16 puntos respecto al año anterior. De las personas que permanecían empleadas al finalizar 2023, el 21% lo hacía con una jornada reducida, porcentaje que se elevaba al 25% en el caso de las mujeres.

Los graduados en 2020 necesitaron de media trece meses para lograr un empleo, frente a los nueve meses de la promoción anterior. Un hecho que se explica por coincidir el final de los estudios con la crisis del covid y sus repercusiones en la economía y el mercado laboral.

En la encuesta han participado el 79% de las personas que acabaron sus estudios ese ejercicio; es decir, 6.804 jóvenes de las tres universidades vascas, de las que un 59% son mujeres y un 41% hombres. A finales de 2023, el 85% de la promoción de 2020 estaba trabajando; otro 7% (666 personas) seguía buscando empleo, y un 7% (670) estaba estudiando un postgrado, otra carrera o una oposición.