
Secciones
Servicios
Destacamos
Cinco parques de bomberos (tres de Gipuzkoa y dos de Bizkaia) participaron en la extinción del incendio que este domingo devoró un edificio en ... Mutriku. La estructura del inmueble era de madera en su totalidad, lo que hace que la alerta en caso de fuego sea mayor. «Si la casa es de madera se movilizan automáticamente dos o tres parques, y una vez allí se valora activar a más, como fue este caso», explica Josu Idigoras, director general de prevención, extinción de incendios y salvamento de la Diputación de Gipuzkoa, quien aplaude la actuación de los bomberos. «Gracias a la rápida respuesta conseguimos confinar el fuego para que no se extendiera a los dos edificios colindantes, que también tenían parte de su estructura de madera».
Es algo muy común en las viviendas de los cascos viejos de Euskadi, «son caldo de cultivo cuando hay un incendio porque la madera es gasolina para el fuego», explica Idigoras, que insiste en la prevención como mejor arma para luchar contra las llamas. «Hacemos campañas de instalación de detectores de humo es este tipo de viviendas, porque además de estar compuestas de madera suelen estar en zonas de difícil , en calles estrechas». El edificio de Mutriku ha quedado, tal y como confirma el director foral, «muy devorado por las llamas». De hecho, durante la extinción temieron que el edificio «colapsara» totalmente. «Está muy afectado y lo más probable es que haya que demoler. Se ha estabilizado la estructura por los edificios de al lado, y lo que ocurra a partir de ahora es competencia municipal», explica Idigoras, aunque los vecinos de las casas colindantes no podrán pernoctar en ellas al menos durante dos noches, por seguridad. El edificio calcinado sigue precintado y no se puede acceder al mismo. Los técnicos del Ayuntamiento han realizado el análisis del mismo con la ayuda de los bomberos con la autoescala.
1.399 incendios atendieron los bomberos en Gipuzkoa durante el año pasado
71% de los fuegos se producen en edificaciones del entorno urbano o rural (caseríos)
La madera agravó sin duda el resultado del incendio, «es mucho peor. En una estructura de hormigón es muy difícil que el fuego se propague si se cierran las puertas y se confina el fuego. Pero la madera es gasolina», insiste el director foral.
Tras el que se registró la pasada semana en Errenteria, han sido dos los incendios en viviendas desatados en Gipuzkoa en un breve espacio de tiempo. Los fuegos en inmuebles urbanos y rurales copan la mayoría de actuaciones por incendio (el 71%) del total, si bien se quedan en apenas el 27% de las intervenciones que realizan los bomberos en el territorio. El otro 27% se dedica a las asistencias técnicas (escapes de gas, retirada de ramas o árboles, achique de agua en inundaciones...) y el 36% son salidas por salvamentos y rescates, accidentes de tráfico en su mayoría, pero también rescates en viviendas o en medios acuáticos.
En lo que se refiere a actuaciones por incendio, el año pasado se registraron 815 en Gipuzkoa. Del total, siete de cada diez (un total de 585) se produjeron en entorno urbano (viviendas, locales, garajes) y rural (caseríos, bordas). Los incendios industriales o en almacén fueron el 8,3% (68); los forestales un 7,4% (61), y los producidos en infraestructuras de transporte, el 13,3% (101). Aunque la estadística los registra, el año pasado no hubo ningún incendio causado por explosión. Además, en 2023 se registraron 584 fuegos en Donostia, que cuenta con su propio parque que es de competencia municipal, aunque también participa en intervenciones en otras localidades cuando se solicita.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.