Dos décimos del 57342 devuelven el Gordo de 'El Niño' a San Sebastián 48 años después

Casualmente, ambos años coinciden en ser bisiestos -también lo fue 2016, que dejó 90 millones en Gipuzkoa-, pero las similitudes podrían restringirse a eso. En 1972, una serie completa del primer premio se vendió en la istración de Loterías número 9 de la capital, lo que dejó cuatro millones de pesetas a cada décimo (unos 24.000 euros de los de ahora). El premio de este lunes se expidió en un estanco, a través de una máquina, y cada décimo dejó 200.000 euros (unos 33 millones de las antiguas pesetas). La modernidad era esto y ahora la suerte se puede encontrar en cualquier terminal ubicada en bares, librerías, estancos o quioscos de prensa. Desde 2010 no son pocos los que legan al azar tecnológico sus opciones de hacerse con un pico en los sorteos de lotería más tradicionales y a vista del resultado, no parece una mala opción.

De hecho, la venta a través de terminal es una de las principales razones por las que el Gordo de 'El Niño' haya caído tan repartido. Donostia es uno de los puntos señalados en el mapa por el primer premio, que también repartió millones en Santander, Las Palmas, Madrid, Albacete, Lleida, Barcelona o Valencia. La localidad toledana de Quintanar de la Orden resultó una de las principales agraciadas, ya que en la istración de Loterías número 2 del municipio se vendieron 40 series del 57342, dejando 80 millones de euros entre sus agraciados.

Y si una máquina fue la responsable de dejar dos décimos del Gordo de 'El Niño' en Donostia, otros cuatro dispositivos permitieron a otros tantos guipuzcoanos embolsarse 75.000 euros cada uno por el segundo premio. El 21816 se jugó en 34 municipios del Estado, entre ellos los guipuzcoanos de Andoain, Hernani, Trintxerpe y, otra vez, San Sebastián. Esos cuatro décimos se adquirieron en distintos locales y solo uno de ellos se expidió en una istración de Lotería, la número 1 de Andoain. El segundo premio viajó también de Benidorm a Melilla, pasando por Cartagena, Girona, Valladolid, Pamplona o Abadiño, aunque la parte más amplia -3,3 millones de los 37,5 que repartió el 21816- alcanzó el municipio almeriense de Adra, donde se vendieron 45 décimos.

El tercer premio, que recayó en el número 26706, se vendió íntegramente entre Valladolid y la localidad valenciana de Torrent.

En total, por tanto, Gipuzkoa se quedó con un buen pellizco de 700.000 euros de los primeros premios de 'El Niño', un botín algo escaso pero mucho más sustancioso que los 136.000 euros que dejó el sorteo de Lotería de Navidad del pasado mes de diciembre. Bizkaia solo pudo presumir este lunes de quedarse con 75.000 euros de un segundo premio vendido en Abadiño, mientras que Álava no logró cazar ni un euro de los tres números agraciados. En Navarra sí que se vendió parte del segundo, pero los 675.000 euros repartidos en nueve boletos no superan el balance de Gipuzkoa.

Hay que remontarse hasta 2018 para recordar un sorteo de 'El Niño' que dejara un pellizco similar en el territorio. Entonces, once décimos del segundo premio dejaron entre Eibar y Anoeta 825.000 euros. El pasado año la suerte pasó de largo en este sorteo.

Con la de este lunes son siete las ocasiones en que el primer premio de 'El Niño' cae en San Sebastián. Las anteriores ediciones en las que la suerte alcanzó Donostia fueron en 1923, 1927, 1930, 1944, 1963 y 1972. Otros tres municipios de Gipuzkoa también presumen de haber vendido el premio principal en la historia del sorteo que inaugura el año. Oñati (1963) y Azkoitia (1995) lo hicieron el pasado siglo, y Pasai Antxo dejó en 2016 la mayor lluvia de millones que se recuerda hasta la fecha en esta cita. 36 millones de euros fueron consignados en esta localidad, aunque 19 millones fueron repartidos por el bar Arri-Zar del barrio donostiarra de Altza, que comercializó un puñado de series del número premiado.

Aunque haya seis guipuzcoanos que este lunes no paren de congratularse por haber jugado un décimo de la lotería de 'El Niño', el balance general de 'premios vs. inversión' en el territorio no ha resultado nada positivo en términos generales por tercer año consecutivo. Según las cifras de Loterías y Apuestas del Estado, los guipuzcoanos han gastado en este sorteo algo más de 10,8 millones de euros, unos 15 euros por cabeza. Por tanto, los 700.000 euros obtenidos en los premios principales apenas suponen el 6,4% del total invertido por los jugadores. Alaveses (15,73 euros por cabeza) y vizcaínos (23,89 euros) han invertido más que los guipuzcoanos, y la media española se situó en los 15,68 euros (732,6 millones en total).