Tres detenidos tras una persecución y disparos en Lezo en una operación antidroga

El automóvil perseguido, un Renault Scenic negro, habría arremetido contra esta unidad, un Peugeot 308 también negro, que resultó dañado y hubo de ser retirado poco después por una grúa. Fue en ese momento cuando los integrantes de la patrulla policial tuvieron que hacer uso de sus armas reglamentarias, llegando a efectuar «algún disparo intimidatorio», según confirmó la propia Ertzaintza.

En estas circunstancias se produjo la detención de al menos uno de los sospechosos que viajaban en el vehículo.

Al menos otra de las personas que estaban siendo perseguidas por la Ertzaintza aprovechó el momento para emprender la fuga en el automóvil, siendo perseguido por los agentes. Cerca de un kilómetro más adelante, a la altura de la rotonda de Altamira, entre Lezo y Errenteria, el conductor habría perdido el control del vehículo, chocando contra varios vehículos y una farola, y poniendo así fin a su intento de fuga.

Fuentes del departamento de Seguridad del Gobierno Vasco señalan que pese a la aparatosidad del evento no se registraron heridos, si bien testigos presenciales aseguran que la persona detenida a la altura de Lopene fue atendida por una ambulancia. Del mismo modo, el presunto delincuente que acabó chocando en la rotonda de Altamira resultó afectado por el impacto, si bien no sufrió heridas de consideración.

El sonido de los disparos causó alarma entre los vecinos del barrio de Lopene, que quedaron sorprendidos por una situación «muy poco común» en un barrio que definen como «tranquilo». «Hemos oído los tiros y al principio pensábamos que eran petardos», relataba Oskitz Insausti, responsable del comercio de suministros eléctricos Argibat, ubicado en la esquina más cercana al lugar de los hechos. «Luego nos hemos dado cuenta de que eran disparos y nos hemos asustado porque pensábamos que habían sido frente a nuestra tienda».

Oskitz observó desde la cristalera del establecimiento cómo uno de los sospechosos abandonaba el vehículo. «He visto cómo ha bajado uno de ellos y también a un ertzaina que llevaba algo en la mano, supongo que era la pistola. Entonces se han oído gritos y hemos visto cómo le obligaba a echarse al suelo para detenerlo. Los ertzainas se han identificado, se han puesto los chalecos y lo han detenido». En ese momento, el vehículo perseguido en el que iban los presuntos delincuentes se dio a la fuga. «Mientras detenían a uno, el coche ha salido lanzado hacia adelante y otro vehículo, imagino que policial, le ha empezado a perseguir a toda velocidad. Supongo que se han visto sorprendidos y se han dado a la fuga. Tenían que ser más de uno porque se han escapado cuando detenían al que ha salido del vehículo».

Este testigo pudo ver desde cerca el estado en el que quedó el vehículo policial arrollado. «El coche de la Ertzaintza que les estaba esperando en el cruce se ha quedado con la parte delantera destrozada. No lo han podido volver a arrancar». El incidente dejó impactados a los vecinos de un municipio acostumbrado a la tranquilidad. «Es una situación muy poco común en Lezo, y más aún en un barrio tan tranquilo como Lopene. Ha sido un poco de película por el ruido y todo el trasiego de coches policiales, algo muy extraño por esta zona», reconocía Oskitz.

El operativo se mantiene abierto y no se descartan nuevas detenciones. El caso está bajo secreto de sumario.