Comienza el sueño de volver a ser campeón

La Real arrancó ayer una pretemporada de cinco semanas y media en las que disputará al menos cinco amistosos antes de medirse el 15 de agosto al Barcelona en el Camp Nou. En el primer día de clase hicieron acto de presencia 23 alumnos, aunque David Silva se ausentó por motivos personales y con permiso del club -en su lugar estuvo Unai Marrero-. Del mismo modo, los realistas comenzaron a ejercitarse sin el internacional Alexander Isak, que llega el 26 de julio, ni con los cuatro jugadores que disputarán los Juegos Olímpicos en Japón -Oyarzabal, Merino, Zubimendi y Sagnan-. De azul y blanco sí que se vistieron los otros tres jugadores, al igual que el francés, que están considerados futbolistas transferibles.

Willian José, Kevin Rodrigues y Aihen Muñoz realizaron el primer entrenamiento de la temporada al mismo ritmo que sus compañeros mientras se les busca acomodo en otros clubes. Sonriente, al igual que el brasileño, estuvo Adnan Januzaj, que tras tener varias reuniones con sus agentes durante los últimos días tendrá que decidir si está dispuesto o no a renovar con la Real. Sin la llegada del portero Mathew Ryan, con el que el club tiene un acuerdo para los dos próximos años, la única cara nueva ayer en el José Luis Orbegozo fue la de Jon Alemán, entrenador de porteros del Sanse que sustituirá a Luis Llopis como preparador de porteros del primer equipo.

La mañana comenzó con una triple sesión de ensayos médicos. Los jugadores, técnicos, del staff y otros trabajadores del club se sometieron a pruebas serológicas para conocer, a los diez minutos, que no había positivos en Covid tras unas merecidas vacaciones. Por si acaso e inmerso en el habitual protocolo, también pasaron pruebas PCR además de un análisis de sangre. Mismo resultado por la tarde; el virus no se ha colado en Zubieta. Sonríe Imanol Alguacil, que con cinco bajas, cuatro de ellas de calado, no pierde a más integrantes al comienzo de la pretemporada.

Las primeras muestras de cariño se dieron dentro de las instalaciones de Zubieta. Según se puede apreciar en las imágenes que distribuyó el club, los jugadores se saludaron con abrazos y entre risas reinando el buen ambiente en el vestuario de un equipo campeón. También hubo reencuentros, a priori más cordiales y no tan enérgicos, entre el transferible Willian José y el director de fútbol Roberto Olabe. El brasileño fue uno más en Zubieta mientras sus agentes como la propia Real le buscan una salida. Mientras, puesto que tiene contrato hasta el 30 de junio de 2024, realizó el primer entrenamiento de pretemporada sin perder la sonrisa.

De hecho, fue el primero en hacer bromas a sus compañeros cuando salieron al césped del José Luis Orbegozo. El ariete de Porto Calvo también participó en el habitual pasillo de collejas después de la renovación de Jon Guridi, el reciente cumpleaños de Ander Guevara y el ascenso a la primera plantilla de Jon Pacheco y Robert Navarro. Antes de echar a sudar, Imanol Alguacil se acercó, como de costumbre, a saludar a la prensa desplazada a Zubieta. Su finura y sus piernas, en las que no hay un gramo de grasa, denotan que el oriotarra tampoco ha bajado la guardia en el aspecto físico. Impoluto y con dos tonos de tez más moreno de lo habitual, también tuvo un bonito detalle tras charlar con un grupo de niños de la fundación que corearon su nombre. En esta Real se cuidan todos los aspectos.

Siguiendo con el plan establecido el preparador físico David Casamichana afinó su silbato para que diera comienzo el primer entrenamiento de la temporada. Los jugadores, en distintos grupos y contándose sus aventuras por las paradisíacas playas de todo el mundo, realizaron una breve carrera continua para comenzar a estirar las piernas. Como durante las últimas preparaciones estivales el balón ya entró en escena desde el primer día. Los jugadores realizaron dos rondos y Casamichana alzó la voz a 8 de julio. «¡¡Vamos, tíos, quiero un ritmo alto desde el primer día!!», gritó el miembro del staff.

Se notó la falta de o con la pelota puesto que los primeros pases fueron erróneos, así como un despeje de Guevara que llegó a la zona en la que estaba ubicada la prensa. El siguiente paso fue un cuadro de pases con picas, salto de vallas y mucho movimiento con balón, aunque el club bajó la persiana de Zubieta tras cumplirse los primeros 30 minutos de entrenamiento. La Real 21/22 ya está aquí.