El Sindicato Médico de Euskadi considera que movilizaciones como las del domingo «no surten el efecto deseado» en Osakidetza

El Sindicato Médico de Euskadi (SME) se desmarca de las manifestaciones que los trabajadores de atención primaria ha convocado para este domingo en las tres capitales vascas, a partir de las 12 del mediodía. Aunque también comparte que la situación laboral del colectivo es «crítica», considera que este tipo de movilizaciones «no surten el efecto deseado en Osakidetza».

A través de un comunicado, este sindicato incide en que «el problema de fondo» de la atención primaria «es la sobrecarga sistemática a la que se ve sometido nuestro colectivo y, por tanto, la solución pasa por reforzar fundamentalmente al colectivo médico». Según explica, han trasladado ya «en multitud de ocasiones» este diagnóstico a Osakidetza, cuya maquinaria, en su opinión, «sigue funcionando gracias al compañerismo, entrega e implicación de los y las profesionales».

En esta línea se ha expresado también hoy el sindicato ELA, que ha criticado que en la reunión de la Mesa Sectorial de Salud celebrada hoy, Osakidetza «no ha propuesto ni una sola medida para paliar y solucionar la grave situación que se vive en los centros de salud». Es más, estima que el departamento vasco de Salud «no tiene ninguna intención de dar pasos para revertir esta situación», que, subraya, «no es coyuntural» sino algo estructural «agravado» por la pandemia.

Esta central sindical se ha referido a los datos que Salud ofreció el pasado febrero, que reflejaban una «foto desoladora» de la plantilla de Osakidetza, ya que «el 58% es temporal», y solo 9.000 de los 24.600 trabajadores tiene más de 8 años de antigüedad. Considera que faltarían 5.000 plazas más, de las cuales 1.000 serían en atención primaria.

Por su parte, el SME costata que en el colectivo médico, «a diferencia de otros», las listas de sustitución están vacías. De esta manera, continúa la nota emitida, «los médicos y médicas llevamos tiempo subsanando la falta de cobertura de cupos», a lo que «ahora» el hecho de tener que «suplir las ausencias» de compañeros enfermos de Covid-19. De hecho, «algunas personas» aun estando confinadas en sus domicilios tras dar positivo en covid, «se han prestado a trabajar voluntariamente desde casa». También personal médico jubilado se ha ofrecido a cubrir bajas laborales con el fin de poder «descargar» a sus compañeros, asegura el comunicado.

Para justificar su ausencia en las manifestaciones de este domingo, los médicos recuerdan que hasta el 9 de diciembre de 2020 formaron parte de la Plataforma Intersindical y estuvimos presentes en todas las movilizaciones». Sin embargo, el SME percibió que «nuestro colectivo no participó de manera masiva. Probablemente porque está agotado, harto, al igual que el resto de sanitarios y sanitarias». Ahora, tras dos años «en esta carrera de fondo» en que se ha convertido la pandemia, «ya no nos quedan reservas». Por ello, no van a pedir «un esfuerzo extra» a sus asociados, al prever que «no se va a ver recompensado» porque suponen que «Osakidetza va a hacer caso omiso» a estas protestas.

Los facultativos, sin embargo, aseguran que su «compromiso» es firme y van a seguir «peleando» por restablecer la Atención Primaria «al nivel que se merece», pero lo harán por «otras vías» como la Comisión de Salud del Parlamento Vasco, mesas sectoriales, reuniones bilaterales y medios de comunicación. Para ello, ven importante la «unión» del colectivo médico «tanto de Atención Primaria como Hospitalaria».

El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria, por su parte, se ha adherido a la convocatoria del domingo y estará en las movilizaciones para denunciar «la falta de planificación, organización y disposición de medios y plantillas para hacer frente a la pandemia» por parte de Osakidetza, Osasunbidea y los gobiernos vasco y navarro, según critican en un comunicado.

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