Tolosa

«El Ayuntamiento asume un riesgo con su proyecto para Sagrado Corazón»

Ahora hay una novedad con relación a este tema, ya que los residentes en el portal 39-A de San Francisco han emitido un comunicado, titulado 'Promesa electoral, derribo judicial', donde advierten que el Ayuntamiento «asume un riesgo que conoce», y aseguran que «en el caso de que se conceda la Licencia de Obra, comience la construcción y el Tribunal ordene el derribo de lo construido de forma ilegal», aprobarán la demolición.

Con este posicionamiento público, los vecinos alegantes quieren «advertir de este riesgo a los compradores de los pisos, porque el Ayuntamiento tiene conocimiento de que puede suceder lo que se anuncia».

Como ya hemos informado, el anterior 'Estudio de Detalle' planteaba la construcción de dos bloques de viviendas tras el derribo de la villa Sagrado Corazón. Uno daba al paseo San Francisco, y el segundo al hotel Oria, abriéndose entre ambos una nueva calle. El proyecto estaba acorde con el Plan General, desarrollaba 23 viviendas dotadas de garajes.

El planteamiento aprobado por el actual equipo de gobierno, se basa en la Modificación del Estudio de Detalle; cambia el uso del suelo y proyecta el mismo número de viviendas, manteniendo intacto el chalet, pero concentrándolas en un solo edificio de ocho plantas de viviendas, que impulsa la promotora Grupo Arrasate. También se genera un nuevo vial rodado que conectará Pedro de Tolosa con la calle Oria a través de la prolongación del paseo San Francisco.

En el comunicado, los vecinos aseguran que la principal «irregularidad del plan urbanístico es la de alterar el uso del suelo utilizando un documento cuyo rango no lo permite, como es la Modificación del Estudio de Detalle». En el Plan General se establece que la zona tiene un uso residencial, y con la Modificación del Estudio de Detalle, la villa pasa a ser de uso residencial/dotacional y el edificio, residencial. Según los vecinos, este cambio de uso requeriría la elaboración de un nuevo Plan General o de un Plan Especial. Argumentan que este planteamiento exigiría una tramitación de varios años y con el Estudio de Detalle «la promotora quiere ganar tiempo para empezar la obra lo antes posible».

En opinión de los vecinos, existen, además, otras muchas «irregularidades urbanísticas en las que el procedimiento incurre, como los incumplimientos de las alineaciones, de las alturas permitidas, de la edificabilidad y del derecho a vistas».

Alegan que las desalineaciones de las fachadas, que se proyectan, están fuera de las indicadas en el Plan General, y que también hay otras desalineaciones, como son las de las alturas de las plantas, al no ser coincidentes con las alturas de los bloques que arrancan desde Pedro de Tolosa; además, la altura del edificio proyectado sobrepasa en más de seis metros la definida en el Plan General y la edificabilidad aumenta en 345 m2.

Los residentes han propuesto al Ayuntamiento soluciones alternativas, que aseguran que cumplen con el régimen jurídico establecido, manteniendo alineaciones, alturas, edificabilidad y el derecho a vistas pero no las han tenido en cuenta. Razonan que, una de las consecuencias del derribo, es la indemnización a los compradores y al promotor, por lo que habría que evaluar su cuantía y el modo de afrontarla económicamente en caso de que la sentencia les fuera favorable.

En el comunicado lanzan preguntas finales: «¿A quién beneficia asumir este riesgo cuando hay soluciones legales alternativas ?; quién/es asume/n las indemnizaciones ? ¿el partido de Gobierno junto con los técnicos municipales ?, ¿ el Ayuntamiento, es decir, el pueblo de Tolosa?»