Carta de Ángela de Miguel a los votantes de Cepyme: «Merecéis que os escuchemos y atendamos»

Cuando queda justo una semana exacta para que se celebren unos comicios cruciales que han partido en dos a la CEOE, la apuesta de Garamendi para desbancar a Cuerva de la presidencia de Cepyme les pide personalmente su «apoyo» y «confianza» a las organizaciones territoriales y sectoriales, así como a las pequeñas empresas que conforman la organización, y les promete que «acudirá a cada rincón de la geografía española a escucharlas» y «trasladará sus necesidades a los espacios de negociación», entre los que se encuentra también Europa.

«Estamos seguros de que podemos lograr estas metas. Por eso, insisto en que no solo debemos hacernos oír a nivel nacional, haciendo uso del diálogo social y la negociación colectiva como herramienta fundamental de participación en la actividad legislativa, de progreso empresarial y económico, y generadora de paz social. Tenemos que ocupar de verdad ese espacio y también hacerlo en las instituciones europeas, cada vez más decisivas en los aspectos que más afectan a las empresas españolas», recalcó la abogada vallisoletana.

De Miguel carga contra una «Cepyme ausente» durante los seis años de mandato de Cuerva, un periodo en el que –critica- la patronal de las pymes «no ha logrado estar presente en el debate público ni ser propositiva e influyente en la medida de lo que merecen nuestras empresas». «Merecéis que os escuchemos y atendamos, pero, sobre todo, que os apoyemos para que no desfallezca ese espíritu», añadió.

Consciente de que «este país necesita pymes más grandes», apuesta por «acompañar cada proyecto empresarial desde el primer minuto» y ayudarles a trazar «un camino de ilusión que oriente su día a día» con la vista puesta en la internacionalización y exportación.

«Iremos de la mano de los trabajadores autónomos y de los jóvenes empresarios, porque tenemos claro que este país necesita vocaciones empresariales y trabajar duro con los que empiezan, para lograr después que sus empresas sean cada vez más grandes, internacionalizadas y con capacidad exportadora», señaló.

Para «dedicar todas las fuerzas necesarias» en esta tarea de lograr una Cepyme «con más proyección, que hable sin complejos, no necesariamente más alto, pero sí más claro», De Miguel se comprometió a dejar otros cargos de responsabilidad y «centrarse» en los próximos cuatro años –si así lo deciden los vocales- en ser «una organización que no necesite presentaciones; que sea útil, cercana y esté alineada con los intereses del tejido empresarial que representa; una CEPYME que empuje con convicción a cada paso en un frente común con CEOE y ATA».