Laboral Kutxa busca crecer en Madridy Barcelona en el ámbito hipotecario

El directivo, que aprovechó sus primeras palabras ante el conjunto de la organización, agradeció «el alto grado de colaboración y compromiso» que ha apreciado en este tiempo en «todos los socios». Y resaltó que el objetivo para Laboral Kutxa pasa por «incrementar la rentabilidad (una de las más altas del sector) para garantizar la pervivencia del proyecto en el día de mañana», así como «fortalecer las parcelas y segmentos de negocio donde tengamos márgenes de mejora y, en paralelo, estar abiertos a explorar nuevas posibilidades de crecimiento».

Adolfo Plaza subrayó, vehemente, que «el propósito irrenunciable de Laboral Kutxa es orientar toda su actividad financiera en la búsqueda de un progreso conjunto para la sociedad, sin que nadie se quede atrás». Y se congratuló de que los «históricos resultados» de 2023 constituyan «un techo histórico» desde el que «abordar los proyectos estratégicos previstos para afrontar los retos de futuro».

Del mismo modo, el presidente recordó que la entidad cumple este año 65 'primaveras', y se mostró «orgulloso» de que «en todo este tiempo ha demostrado su capacidad de adaptación a escenarios muy diversos, superando crisis financieras mundiales y momentos de inestabilidad».

Así, recordó que el patio financiero español estaba ocupado en 2009 por casi 200 entidades, de las que a día de hoy sólo 93 mantienen su actividad. «El mérito de Laboral Kutxa no es permanecer, sino gozar de una salud envidiable y estar hoy en mejor forma que nunca», dijo.

Plaza no eludió hablar de los retos que amenazan la economía mundial (y también la vasca), desde los geopolíticos al riesgo climático, y puso el foco en el reto demográfico, «crítico en el devenir del negocio», ya que, apuntó, le afecta desde varios frentes, también desde el de la búsqueda de talento.

Tras la intervención inicial de Plaza, que también clausuró el acto, intervino Xabier Egibar, director general y hombre fuerte de la entidad, al que le correspondió el repaso a los grandes números de 2023 (alentados por el escenario de altos tipos de interés) y la presentación de los planes de futuro de la entidad. ·En 2024, afirmó, «seguirá el ciclo positivo de rentabilidad».

El ejecutivo comentó que Laboral Kutxa tiene una doble agenda estratégica, que implica «competir en el presente y prepararse para el futuro». Según adelantó, la cooperativa seguirá con su remuneración del pasivo (fue pionera en 2023), que buscará complementar con una oferta de fondos de inversión. También se ha conjurado para crecer en el mercado de créditos a empresas, sobre todo en el de las más pequeñas.

En el ámbito hipotecario, resaltó Egibar, el desafío es mantener la actual cuota de mercado e intentar crecer en los «territorios de expansión: Madrid y Barcelona». La cooperativa, dijo, aspira a invertir en la red comercial y priorizará reforzando el control de los riesgos cibernéticos. Y puso especial énfasis en la voluntad de la entidad de reforzar y los valores cooperativos  desde el programa 'Zentzua' «con el que aseguramos una relación honesta con nuestros clientes, con el compromiso social como seña de identidad».