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El chubasquero está de aniversario porque cumple un cuarto de milenio. ¿Sabes cómo nació esta prenda convertida hoy en día en todo un imprescindible? Tenemos que viajar hasta principios del siglo XIX para conocer a Charles Macintosh, un escocés que dedicó su vida a la química. Un día, cansado de llevar el paraguas en la mano, decidió combinar de forma casual el caucho con varias sustancias químicas creando así, en 1823, la prenda exterior impermeable más icónica de todos los tiempos; ese elemento al que hoy en día llamamos chubasquero.
Sin embargo, la mezcla que se usaba en los inicios con la nafta de alquitrán con caucho como protagonista, no sólo protegía de la lluvia, sino que desprendía un fuerte olor. Con el paso de los años, gracias a las mejoras incorporadas a la industria textil y a la suma del algodón, se optimizó su flexibilidad y finalmente se pudo comercializar de forma más fácil y útil.
Han pasado décadas, siglos… desde entonces, pero el chubasquero no ha pasado de moda. Ni muchísimo menos. Actualmente sigue siendo una de las prendas clave de cada otoño-invierno. Y una de las industria creativas responsables de que esta pieza no haya caído en desuso durante el siglo XX ha sido el cine. El chubasquero se ha convertido en protagonista de multitud de películas y series con títulos de culto como 'Cantando bajo la lluvia' (1952) donde los tres actores principales lucieron en el cartel esta llamativa prenda; unos años más tarde, 'Los Goonies' (1985) marcando a toda una generación, con el protagonista portando esta característica vestimenta en todas sus aventuras; Y en las últimas décadas ha seguido estando muy presente en películas como la primera versión de 'IT' (1990) o la serie alemana 'Dark' (Netflix).
La sociedad busca comodidad en su día a día y más desde la eclosión de la pandemia y el cambio de paradigma provocado por ésta. En los últimos años se ha mejorado mucho la calidad de esta prenda exterior, con tejidos como el poliéster, que te resguarda del frío a la vez que aporta flexibilidad y movilidad.
Dentro de este espectro, hay infinidad de chubasqueros. Los podemos encontrar en distintas larguras, colores, con capuchas y bolsillos. No sólo se han convertido en un 'must have' anti-lluvia; la influencia de las películas anteriormente citadas y las propuestas surgidas en las pasarelas internacionales, han conseguido que sea un imprescindible para los 'trendsetters' y resto de los mortales. De esta manera, se ha situado como una pieza comodín que no puede faltar en cualquier fondo de armario gracias a sus diseños atemporales que, además, pueden ser utilizados por ambos sexos.
Y si hablamos de la creación de un buen fondo de armario, no podemos dejar de mencionar a la firma Polo Club. La marca 'made in Spain' por excelencia en esta materia se ha sumado a la fiebre por el chubasquero y lo ha incorporado a sus colecciones ampliando modelos. La firma apuesta por diseños de alta calidad, con estilo y ofreciendo una gran comodidad. No hay que irse demasiado lejos de 'shopping' para sumar un diseño '' a nuestro vestidor.
Para ajustarse a todos los gustos y cuerpos, el diseño Polo Club se puede elegir dentro de una amplia variedad de colores donde, por supuesto, no falta el amarillo y otras tonalidades más discretas y fáciles de combinar como el negro o el 'navy'. Además, se encuentra disponible en un abanico de tallas que se inicia en la S y llega hasta la triple XL. Ahí es nada.
Por lo tanto, si necesitamos un abrigo funcional, icónico y de gran calidad, los chubasqueros de Polo Club no desmerecen a las líneas más británicas y mediáticas que siempre nos vienen a la cabeza.
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