La exposición '100 años de Chillida' se mantendrá hasta enero

La gran acogida del público lleva a Chillida Leku a prorrogar esta muestra sobre la transformación del artista basada en fondos de la Fundación Telefónica

A. C.

Martes, 3 de septiembre 2024, 12:14

Chillida Leku prorrogará hasta el próximo 12 de enero la exposición '100 años de Eduardo Chillida con la Colección Telefónica', que fue inaugurada el pasado ... mes de mayo y que tenía previsto finalizar en octubre. Las más de 32.500 visitas que ha recibido la muestra en estos meses ha llevado a Chillida Leku a mantener la muestra, que supone uno de los grandes hitos de la conmemoración del centenario del nacimiento del artista y refleja su transformación de 'herrero' a 'arquitecto' en los años 80.

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«Estamos muy contentos con la acogida que el público ha dado a la exposición, que nos da una oportunidad única de reconectar con el espíritu de Chillida y de presentar su obra a nuevas generaciones», señala Mireia Massagué, directora de Chillida Leku. «La prórroga es una oportunidad para seguir disfrutándola y para reflexionar sobre cómo su visión y su arte siguen siendo relevantes en el siglo XXI».

'100 años de Eduardo Chillida con la Colección Telefónica' reúne una selección de piezas del escultor que forman parte del patrimonio artístico de Telefónica. La selección de esculturas –todas ellas de grandes dimensiones– reflejan un momento clave en la trayectoria de Eduardo Chillida: los años 80. Estas se completan además con piezas de los años 1990 y 2000 procedentes de colecciones privadas y del propio museo. El conjunto se puede ver en el caserío Zabalaga de Chillida Leku, lugar que marca el inicio de una nueva etapa de grandes cambios y madurez del artista.

Esta exposición tiene como objetivo mostrar cómo los años 80 fueron decisivos en la trayectoria artística de Eduardo Chillida: se trata de la etapa en la que alcanza el tamaño monumental a nivel de obra pública y, además, profundiza en nuevos conceptos artísticos y proyectos de manera íntima. En este sentido, el año 1981 está marcado por la muerte del galerista y representante Aimé Maeght y, a pesar de que supone el final de una etapa en la trayectoria del artista, también marca el inicio de una nueva en la que coexisten importantes exposiciones retrospectivas, la realización de obras de gran formato, en especial las mesas, y las casas, estas últimas esculturas de tamaño reducido, arquitecturas que se conforman de materia y vacío.

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