MIGUEL ANGEL MATA
Jueves, 2 de octubre 2014, 00:20
La amplia mayoría de exsocios de Fagor Electrodomésticos prefiere seguir siendo cooperativista y mantenerse en el entramado del Grupo Mondragón que volver a trabajar en su antigua empresa como empleado por cuenta ajena para una compañía de capital como Cata, la nueva propietaria del fabricante de Arrasate. De ellos, más de mil han sido recolocados en otras cooperativas y prefieren mantenerse en su nuevo destino aunque en la mayoría de los casos la reubicación es temporal, y unos 300 mayores de 55 años han podido prejubilarse. Pero quedan unos 400 que siguen esperando a ser llamados para trabajar mientras engrosan una bolsa de empleo que la corporación tiene abierta para tratar de buscarles nueva ocupación. Ni siquiera a estos últimos les seduce la oferta de empleo de Cata y la mayoría prefiere seguir esperando una oportunidad dentro del mundo cooperativo mientras cobra de Lagun Aro la prestación por desempleo.
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