La lonja de Pasaia ganará 6.000 m² y se afianza como la tercera más importante del Estado

Una vez que el edificio cabecera ha tomado forma, la última intervención prevista tiene como objeto la matriz de esta infraestructura, el espacio en el que a diario se exponen para su venta y subasta las capturas que llegan tanto por tierra como por mar. Esa suerte de Wall Street del Cantábrico verá ampliado el espacio actual, que hace tiempo se ha quedado pequeño para los s que concurren en él. A los 9.542 metros cuadrados que entraron en funcionamiento en el año 2013, se sumarán otros 5.983 metros cuadrados más para alcanzar un total de 15.525. En este recinto se habilitarán ocho nuevos módulos de asentadores, similares a la treintena ya existentes.

«La segunda fase saldrá a licitación este mismo año para que la obra comience a finales de 2023. Se espera que los trabajos concluyan en 2024», explica el director del Puerto de Pasaia, David Candelario.

La esperada ampliación contribuirá a que la mayor plaza de venta y de comercialización de los productos de pesca de Gipuzkoa se afiance, asimismo, como la tercera lonja más destacada del país, después de las de Vigo y A Coruña. En ella se movieron cerca de 20.000 toneladas de pescado a lo largo de los últimos doce meses. La merluza es la estrella indiscutible de las más de 80 especies diferentes desembarcadas por la flota de bajura.

Además de en estas instalaciones consideradas clave, también se actuará en el sótano. Así, a los más de 4.300 metros cuadrados que ya se encuentran en uso en la actualidad, se añadirán cerca de 2.000 metros cuadrados más. Es en esta planta en la que se sitúa el aparcamiento, que se dotará de 35 nuevas plazas, alcanzando las 149 plazas rotatorias.

Mientras se ultiman los detalles de la fase final de la construcción, la Autoridad Portuaria de Pasaia ha sacado a licitación la explotación de la cafetería y el restaurante proyectados en el denominado edificio cabecera, el equipamiento más próximo al casco antiguo de Pasai San Pedro.

El establecimiento hostelero contará con dos plantas. La primera, situada a pie de calle, se traduce en 305 metros cuadrados. La superior suma 250 metros cuadrados, que incluyen una pequeña terraza con vistas a las aguas interiores de la dársena. Ambas se conectarán mediante escaleras y un ascensor.

A la hora de valorar las propuestas que se presenten a este concurso público se tendrán en cuenta diferentes cuestiones. Para empezar, el origen de la materia prima que esté presente en sus platos o la adaptación de los horarios a las necesidades de los s, aunque el negocio estará abierto a todo el público. El plazo para la presentación de ofertas finalizará el próximo 14 de marzo. La concesión se otorgará por un plazo de 20 años, prorrogables cinco años más.

El resto de espacios que conforman el edificio cabecera han entrado en uso. Ese es el caso de los 15 despachos destinados a empleados portuarios y a s de la lonja pesquera, entre los que se incluyen mayoristas, asociaciones y personal de sanidad. Más de la mitad de estas oficinas han sido ya ocupadas.

La edificación, provista de tres plantas, se ha dotado de diferentes salas en las que se celebrarán conferencias, reuniones, exposiciones y otros eventos. Dan lugar a un espacio «multipropósito», moderno y funcional, que se caracteriza por su «versatilidad».

Al mismo tiempo que unas obras se anuncian y otras se dan por finalizadas, en las últimas semanas se han puesto en marcha las referidas a la fase final de la urbanización de la lonja. Una vez inaugurada la plaza ubicada junto al edificio cabecera, toca abordar la cubierta del inmueble, de 16.000 metros cuadrados, donde se construye un parque ajardinado transitable, que enlazará con una ladera vegetal construida sobre un importante relleno de tierras. Esta ladera, en la que se plantarán diferentes especies de árboles y arbustos de diversos tamaños, cerrará la infraestructura y ayudará a aminorar el efecto visual de toda su fachada oeste, a lo largo de la calle Esnabide, dando como resultado un «mayor equilibrio urbanístico».

Esta actuación supone una inversión de 3 millones de euros. «En total, se han invertido cerca de 5 millones de euros en la urbanización de este espacio de Pasai San Pedro con la financiación, a partes iguales, de la Autoridad Portuaria, la Diputación Foral de Gipuzkoa y el Gobierno Vasco», recuerdan desde el Puerto.