Sare entiende «el dolor de las víctimas» por los 'ongi etorri'

Alrededor de 1.500 personas según fuentes oficiales del Ayuntamiento de Bilbao, recorrieron ayer las calles de Bilbao para reclamar el fin de la dispersión de los presos de ETA y otra política penitenciaria. La marcha discurrió sin incidentes durante todo el recorrido. Se trata de la habitual manifestación que Sare realiza en la Semana Grande. Aunque al igual que el año pasado apenas se desarrollan actos festivos, los organizadores habían apostado por mantener la convocatoria, que estuvo condicionada por las restricciones de la covid y las distancias de seguridad entre los asistentes.

La manifestación arrancó pasadas las 19.30 horas de la Plaza Moyúa. Antes de empezar, la portavoz de Sare Bego Atxa se refirió, a preguntas de los periodistas, a la polémica sobre los 'ongi etorri'. «Entendemos el dolor de las víctimas, también entendemos la necesidad de los familiares y amigos de recibir a sus allegados y creemos que lo principal es encontrar un equilibrio entre ambas vertientes», respondió la representante de Sare.

La marcha recorrió toda la Gran Vía, hasta llegar a la Plaza Circular y finalizar en la Plaza Nueva. En un ambiente festivo y con la participación de varios de las comparsas, Atxa leyó el comunicado oficial. La representante de Sare reconoció que durante los últimos años, en alusión a la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa, «se están dando pasos, pero no son suficientes toda vez que sigue en vigor la legislación de excepción».

Atxa insistió en que Sare no reclama «una legislación privilegiada» para los presos de ETA «pero sí una legislación igual a la que se aplica al resto de presos comunes». En este sentido, anunció que seguirán «trabajando» por el acercamiento a las cárceles vascas y la progresión de grados. «Creemos que no se puede dar un proceso de acercamiento a casa sin que se cumplan esas dos vertientes».

«Tenemos que decir que los cambios que se han dado en cuanto a los presos también han supuesto un rayo de luz a lo largo de este difícil año», aseguró la portavoz del colectivo. En su opinión, después de «largas décadas», se han producido «pasos significativos para poner fin a la política de alejamiento», algo que «está siendo fundamental, sobre todo para aligerar la carga de los familiares y amigos».