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La cuenta atrás termina este sábado. Maialen Chourraut entra esta tarde en acción en la que será su quinta participación en unos Juegos Olímpicos. La ... lasartearra afronta la primera de sus dos citas en París, la prueba de piragüismo en aguas bravas K-1, en la que obtuvo sus mejores éxitos en las tres últimas participaciones olímpicas. Después de tres medallas, el bronce de Londres 2012, el oro de Río 2016 y la plata de Tokio 2021, la guipuzcoana se presenta este sábado en París con la misma ilusión y ambición.
Todas las pruebas de eslalon se llevarán a cabo en el nuevo estadio de aguas bravas. El Náutico Vaires-Sur-Marne, situado al este de París, hospedará todas las pruebas de piragüismo olímpico. Las federaciones sas de remo y de piragüismo se encuentran maravilladas con el flamante recinto náutico, que se convirtió en la primera instalación olímpica construida tras finalizarse las obras en 2019.
La palista del Atlético San Sebastián vuelve a postularse como una de las favoritas a colgarse las medallas pero el eslalon de aguas bravas es un deporte muy complicado de pronosticar, con posibles sorpresas e infinidad de combinaciones. Aunque la piragüista se muestra cauta frente a las apuestas, todas las miradas se dirigen este sábado a la guipuzcoana, que obtuvo el segundo puesto en la última prueba del circuito mundial, solo superada por la australiana Jessica Fox, otra de las grandes aspirantes.
La de Lasarte no ha escondido la ambición con la que llega a París y por ello decidió declinar la oferta de abanderar a la expedición en la ceremonia de apertura y centrarse en su temprano debut, en la prueba que tendrá lugar esta tarde, a pesar de que le correspondía ese honor por palmarés.
La primera serie del K-1 arranca a las 15.50 horas, mientras que la segunda manga lo hará a las 18.00 horas. Chourraut no quiere sorpresas y busca cerrar su clasificación para la fase final por la vía rápida. La jornada marcada en rojo en el calendario es la de este domingo. A partir de las 15.30 horas se disputará la semifinal y, salvo sorpresa, Chourraut luchará por los metales en la prueba final prevista para las 17.45 horas.
Será su primer intento de medalla, pero no el único. A los 41 años y una dilata carrera ha reconocido encontrar una motivación extra, ya que además de en eslalon, donde ha conseguido sus grandes éxitos, competirá en kayak cross. En esta nueva especialidad la prueba da comienzo sobre una rampa situada a más de dos metros de altura sobre la lámina de agua. Ahí, cuatro kayaks idénticos entre sí se deslizan por la rampa para completar un descenso de no más de un minuto.
En el kayak cross, que se disputará del 2 al 5 de agosto, Chourraut será compañera y rival de Miren Lazkano. La donostiarra se estrena en unos Juegos Olímpicos con la ilusión y los nervios de la primera vez. La palista de 27 años aseguró llegar a la cita físicamente preparada y apuntó antes de viajar a París que su objetivo será el de rendir a su máximo nivel. Antes de compartir prueba con la que siempre ha sido un referente en el que mirarse –comparte club con Maialen desde que era una niña– Lazkano participará en la categoría C-1 de piragüismo slalom. Se estrenará el martes con la canoa en las primeras series, mientras que la semifinal y la final se decidirán el miércoles por la tarde.
La donostiarra comparte estos días el nerviosismo del debut con Pau Etxaniz, para el que también será su primera vez. En este caso, el piragüista tiene el potencial de sorprender y destacarse entre los mejores del mundo. Entrará en liza de martes a jueves, día en el que se decidirán las medallas. Etxaniz reconoce que no busca «el resultado», pero entre risas ante los medios señaló que «satisfecho me iría con el oro».
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