Borrar
EFE
A dos velas

A dos velas

En situaciones angustiosas, nuestra mente se pone a jugar consigo misma al catastrofismo

Sábado, 3 de mayo 2025, 00:01

Hay rachas en que la realidad nos impone un ritmo mental vertiginoso. La muerte del papa nos convirtió a todos en teólogos repentinos, y estábamos ... a punto de alcanzar el B1 en asuntos eclesiásticos cuando sobrevino el apagón, lo que nos obligó a convertirnos en expertos en energía. Por supuesto, una cosa es opinar de algo y otra cosa muy diferente es saber de algo, pero siempre resultará más cómodo emitir una opinión que adquirir conocimientos con respecto a la materia opinable. Por si fuese poco, no solo somos aficionados a opinar improvisadamente con arreglo a nuestras convicciones o sospechas, sino también a opinar improvisadamente sobre lo que improvisadamente opinan los demás.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¿Tienes una suscripción? Inicia sesión

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco A dos velas