Más de la mitad de las madres jóvenes vascas ve «equilibrado» el reparto de la crianza de los hijos

Y aunque ser padre es una realidad que pocos jóvenes en Euskadi pueden alcanzar, en gran parte por las «dificutades económicas» o la «situación laboral» que atraviesan, el 65,3% de los hombres que lo son dicen que su estado emocional «ha mejorado» desde entonces. La mitad de las madres opina igual, aunque solo el 23,1% de ellas está «muy de acuerdo» o «bastante» de acuerdo con que su relación de pareja ha mejorado desde que tienen hijos o hijas. Es el resultado de una encuesta realizada por el Observatorio vasco de la Juventud -dependiente del Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico- entre 2.323 personas de entre 25 y 39 años. Las diferencias entre las respuestas a las mismas cuestiones son más pronunciadas cuando se diferencian los sexos.

En términos generales, más de la mitad de los padres y madres de Euskadi de entre 25 y 39 años (56,5%) se siente «abrumado» con las responsabilidades que acarrea tener un hijo o hija. Así lo expresa un 61,8% de ellas, frente a un 45,5% de los padres. Además, un 65,3% de ellos cree que su estado emocional ha mejorado desde que su hijo llegó al mundo y el 40,7% de los padres cree que la relación con su pareja es mejor desde entonces. Solo el 13,1% de ellas opina igual.

También la situación laboral de los padres y madres encuestados influye en sus respuestas. Las personas cuya ocupación principal no es el trabajo remunerado -en su mayoría mujeres- afirman en menor medida que quienes sí trabajan que el reparto de las tareas de crianza y del hogar no es equitativo, se sienten más abrumadas por las responsabilidades de la maternidad/paternidad y niegan en mayor medida que la relación de pareja haya mejorado desde que tienen hijos o hijas.

Sin embargo, el 70,3% de los encuestados que trabajan fuera del hogar cree que el estrés laboral afecta a su bienestar como padre o madre. Desglosado por sexos, ellas lo sufren más, con un 48,5% de las madres afirmando que el estrés laboral afecta en la crianza de sus hijos, frente al 30,1% de ellos que opina igual.

El 46,5% de los encuestados, por su parte, cree que las preocupaciones derivadas de la crianza afectan a su rendmiento profesional; eso sí, casi la mitad de las personas con trabajo opinan que las medidas de conciliación ofrecidas en sus trabajos son suficientes. En lo que a progresar laboralmente se refiere, casi la mitad de las encuestadas con hijos (48,5%) cree que su maternidad le afecta negativamente en su desarrollo profesional. Solo el 27,1% de ellos siente está preocupación.

El origen de los encuestados también genera diferencias en sus respuestas. De las 2.323 personas encuestadas, el 80% son nacidas en Euskadi, el 15% en el extranjero (principalmente en Latinoamérica, el 10%) y un 4% en otra comunidad autónoma española. Y es que las personas nacidas en el extranjero afirman en mayor medida que su estado emocional ha mejorado desde que tienen niños (38,7% frente a 23,5%) y que la relación con su pareja también ha mejorado (18,7% frente a 6,2%).

Los nacidos en el extranjero creen en menor medida (32% frente a 40,9%) que el estrés de su trabajo afecta a su bienestar como padre o madre. También están más satisfechos con las medidas de conciliación que les ofrece su trabajo.