La investigación de la Ertzaintza concluyó que Iñaki Badiola era el titular de la cuenta Gipuzkoa Confidencial en un «99,9%»

El agente, miembro de la sección de delitos en Tecnologías de la Información, realizó una investigación en internet por requerimiento de la Fiscalía de Gipuzkoa para determinar quién era el titular de la cuenta de Twitter Gipuzkoa Confidencial. El perito ha explicado que fue dando una serie de pasos, y que todos ellos apuntaban a la misma persona, Iñaki Badiola, acusado en este caso.

En primer lugar realizó una búsqueda a través de internet introduciendo el nombre de la cuenta, y el primer resultado que apareció era la cuenta de Twitter personal del señor Badiola. «En este tipo de búsquedas no suelen aparecer directamente relacionadas personas. Aparecen 'nicks' o páginas similares. Pero era el primer enlace que aparecía», ha explicado.

Después intentó recuperar la cuenta de gmail vinculada a ese Twitter, asociada a un teléfono móvil del que solo eran públicas las dos últimas cifras. «Consulté nuestra base de datos policial y el teléfono de Iñaki Badiola terminaba en las mismas dos últimas cifras». Ya son muchas casualidades», ha indicado. Asimismo, comprobó que el número personal del acusado tenía vinculadas más de una cuenta en esa red social.

Además, ha señalado que comprobó que a través de su cuenta personal de Twitter, el expresidente de la Real Sociedad retuiteaba continuamente las publicaciones de Gipuzkoa Confidencial. «Era brutal. Era un muy activo respecto de esa cuenta, y trata de difundirla lo máximo posible, tenía demasiado interés en hacerlo».

Así, ante estas evidencias, concluyó que «con 99,9% de probabilidad, la persona detrás de la cuenta Gipuzkoa Confidencial es Iñaki Badiola Menéndez», y así se lo trasladó a la Fiscalía de Gipuzkoa.

Sin embargo, para la defensa estas no son pruebas suficientes para acusar a Iñaki Badiola de gestionar las cuentas desde donde se cometieron los delitos que se están juzgando y por los que se piden penas que suman 66 años de prisión. Así, a través de su propio perito, ha cuestionado el por qué no se investigó el teléfono del acusado para comprobar su vinculación con la cuenta de gmail asociada a Gipuzkoa Confidencial o se incautó el mismo. El perito de la Ertzaintza ha insistido en que «hubiésemos llegado mucho más lejos, como en otras investigaciones», si la Fiscalía lo hubiese requerido.