El principal sospechoso de la red de pederastia cometió «14 actos delictivos de naturaleza sexual de extrema gravedad»

Entre los argumentos que da el tribunal para que permanezca entre rejas está «evitar tanto el riesgo de fuga como el de reiteración delictiva». «Tiene su fundamento en una conducta continuada en el tiempo y en un número elevado (en el atestado se mencionan hasta 14 distintos) de actos delictivos de naturaleza sexual de extrema gravedad», afirma la Audiencia Provincial. La víctima era una menor de 12 años. Vivía en un centro bajo el paraguas de la Generalitat. Fue violada de forma reiterada por el principal acusado y por un grupo de hombres. El líder de la trama ya fue detenido en 2010 en Valencia por prostitución de menores. «Del propio atestado policial, de las declaraciones testificales y del contenido de los dispositivos de almacenamiento digital intervenidos, se derivan numerosos y consistentes indicios que dejan pocas dudas sobre la participación en los hechos delictivos», según recoge el auto de abril de 2024.

La instrucción del caso está cerrada y la causa está a la espera de que la Audiencia de Barcelona fije a fecha del juicio. De esta causa, se derivaron dos investigaciones más, en las que también está implicado Teófilo L. M. En total, hay 16 personas investigadas por la justicia, aunque la cifra podría llegar a la treintena. Víctimas confirmadas hay siete, pero puede haber hasta 25.

De los 16 imputados, dos están en prisión provisional: Teófilo L. M. y L. A. H. B. Este último recurrió dos veces su prisión provisional, en las dos ocasiones el juez lo rechazó. «Dada la gravedad de los hechos y las penas que pueden llegar a imponerse, existe un riesgo alto de fuga, ampliado por la falta de arraigo en España», justifica la justicia, en un auto de junio de este año .

El acusado alegó que pensaba que la víctima tenía 18 años (y no 13) y que incluso en el visionado de los vídeos «se oye la conversación de la joven con el investigado y es ella la que tenía un fuerte carácter e incluso daba instrucciones».

Argumentó también que tiene domicilio conocido, que tiene una pareja de 21 años de edad y un hijo de poco más de un año. Los jueces, en cambio, aseguran que las diligencias hasta la fecha practicadas avalan la tesis de que el investigado conocía o podía conocer que estaba ante una «adolescente precoz y no ante una adulta» y que participó en la grabación de vídeos constitutivos de pornografía infantil. Sobre su arraigo, la justicia señala que reside en España desde el año 2019 y que está tramitando la autorización de residencia. Trabaja con el «alta de autónoma de su esposa».