La Autoridad Portuaria de Pasaia recuerda la prohibición del baño en la bahía

Con la llegada del buen tiempo, no es extraño encontrarse a los primeros bañistas dándose un chapuzón en las aguas de la bahía de Pasaia y no siempre con las debidas medidas de seguridad. Los saltos desde más allá del arco de Bonanza de San Juan y desde las inmediaciones del club de remo de San Pedro hacen contener la respiración a los viandantes. Estas zonas del litoral presentan rocas en su fondo y no demasiada profundidad.

En lo que va de verano, además, son varios los jóvenes, que han empleado las balizas colocadas para favorecer el tráfico marítimo como improvisados trampolines. Suben varios metros la estructura de metal y se precipitan al mar en el canal de a la dársena.

Estas situaciones han llevado a la Autoridad Portuaria de Pasaia a hacer público un comunicado en el que recuerda a la ciudadanía la prohibición de bañarse en la dársena, especialmente tras el registro estos últimos días de «episodios relacionados con el uso inadecuado y peligroso» de varias zonas del puerto para este fin.

En el texto se hace hincapié en que las aguas de la bahía están reservadas exclusivamente a actividades portuarias, pesqueras, deportivas y de náutica recreativa, siempre reguladas para garantizar la seguridad y el buen funcionamiento del entorno portuario. «Cabe recordar, además, que, dada la prohibición del baño, son aguas que carecen de servicio de socorrismo», precisa.

El Puerto señala que el incumplimiento de estas directrices supone un «importante riesgo» para la seguridad de las personas, puesto que la actividad diaria en la bahía implica continuas maniobras de embarcaciones y otras actividades de navegación, «incompatibles» con el baño. «Especialmente grave es la invasión por parte de bañistas del canal que permite el a la bahía de los barcos mercantes y pesqueros», declara.

La utilización de las balizas de señalización marítima para saltar al agua representa «un grave peligro» para la seguridad de las personas, «a lo que hay que añadir que dichas señales son una herramienta esencial para el desarrollo seguro y eficiente de la actividad marítima; es decir, no se trata de elementos para el recreo y la actividad bañista». Su manipulación y empleo para tales fines está también totalmente prohibido.

Por ello, la Autoridad Portuaria anuncia que instalará, en puntos de especial riesgo, carteles prohibiendo el baño y el a las señales marítimas. A lo largo del verano mantendrá una especial vigilancia para su cumplimiento y así, evitar malas prácticas y los accidentes que conllevan.

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