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Incógnita despejada: Imanol Pradales sí acudirá a la Conferencia de Presidentes que el próximo 6 de junio acogerá el Palau de Pedralbes de Barcelona. Su ... asistencia llevaba días en el aire, pero finalmente el lehendakari ha tomado la decisión de trasladarse la próxima semana a la capital catalana para participar en la cumbre de líderes autonómicos convocada por Pedro Sánchez, que ha trasladado su compromiso al lehendakari de que se incluirá en el orden del día, todavía no cerrado, según fuentes de Presidencia del Gobierno Vasco.
El propio Pradales supeditaba su presencia a la inclusión en el orden del día de cuestiones vitales que afectan a la agenda vasca, sobre todo, en materias relacionadas con la política energética. Así, tal y como avanzó la portavoz del Gobierno Vasco, Maria Ubarretxena, Euskadi buscaba a toda costa poder debatir en dicha reunión sobre las medidas necesarias a implementar para garantizar la descarbonización. Además, también se quería poner sobre la mesa la necesidad de que el Gobierno central invierta en la mejora de la red eléctrica vasca para cubrir las necesidades actuales y futuras de la industria vasca. Objetivo cumplido.
Pradales ha anunciado este viernes que acudirá a la cita con el resto de presidentes autonómicos para presentar «una nueva propuesta para avanzar en la transición energética y descarbonización de la industria». Un debate que se ha agudizado aún más desde que el pasado 28 de abril toda la península sufriese un apagón histórico y se pusiese en cuestión nuestra dependencia energética.
El lehendakari ha asegurado en todo caso que Euskadi cuenta con capacidades propias para desarrollar y atraer proyectos empresariales y tecnológicos vinculados a la descarbonización. Y así lo trasladará el próximo día 6 en Barcelona. «No invertir en la mejora de la red eléctrica vasca podría deslocalizar actividad empresarial y poner en riesgo el empleo de más de 75.000 personas», ha alertado el jefe del Gobierno Vasco durante una visita este viernes a las instalaciones de Arcelor Mittal en Sestao.
Las dudas sobre si el lehendakari acudiría a la cita en Barcelona -es la segunda Conferencia de Presidentes a la que asiste, tras la última convocatoria celebrada en Santander- se acrecentaron después de que el pasado miércoles se celebrara en Madrid el comité preparatorio que se suponía iba a establecer los temas que se abordarán en dicha reunión. Pero la oposición de los presidentes autonómicos del PP echó por tierra cualquier consenso y la reunión con el Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática -fue Ubarretxena quien participó en representación del Gobierno Vasco- acabó sin acuerdo.
Antes de que saltara todo por los aires, Lehendakaritza había confirmado la asistencia del lehendakari tras lograr su objetivo de introducir en el orden del día el debate energético vasco. Y cuando todo parecía encarrilado en la reunión preparatoria, todo se torció y desde el equipo de Pradales volvieron a la casilla de salida: el jefe del Gobierno Vasco acudiría a la cita siempre y cuando se atendiese su petición.
Finalmente, y ante la negativa de los populares a acordar los temas a tratar en la Conferencia, ha sido el propio Gobierno central quien, desde su potestad, ha establecido el orden del día. Y en dicha agenda, tal y como ha adelantado Pradales, se incluirá la petición de Euskadi de debatir sobre energía.
En todo caso, desde Lehendakaritza ya expresaron el miércoles que el Gobierno Vasco mantenía su disposición a acudir a la cumbre para poder expresar su posición y defender los intereses de Euskadi en una cuestión, apuntaron, «de vital importancia» para la industria y la economía vasca, como la transición energética y la descarbonización. Como finalmente podrá hacer Pradales.
Y es que esta cuestión es crucial para el Ejecutivo autonómico vasco. El propio Pradales aprovechó su intervención en un pleno de control a principios de mayo para urgir al Gobierno de Sánchez ampliar en 6.000 megavatios adicionales la red eléctrica vasca. Y es que, tal y como dijo entonces, la ampliación de 1.380 megavatios anunciada hace ya unas semanas «es positiva, pero no suficiente». De ahí su intención de aprovechar esta foro político al más alto nivel para exigir de nuevo esta reclamación y que se puedan así incorporar esos 6.000 megavatios adicionales a Euskadi en la próxima planificación estatal que debe aprobarse este mismo año.
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