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El atraco perpetrado el pasado 14 de abril en una sucursal bancaria del barrio donostiarra de Altza fue presuntamente organizado por el empleado que ... se presentó como víctima, su hermano y una tercera persona amiga de estos. Así lo cree al menos la Ertzaintza, que ha detenido a los tres, según ha informado este miércoles la policía autonómica. Hacia las 8.00 horas de aquel lunes a las puertas de la Semana Santa, dos encapuchados abordaron mientras se dirigía a su puesto de trabajo a un empleado de la sucursal que Caixabank tiene en Altza. Era el encargado de la apertura de la oficina ese día. Según la versión inicial de los hechos, los asaltantes se sirvieron de la fuerza y las amenazas hacia esta persona para poder acceder a la caja acorazada, logrando hacerse con un suculento botín.
Todo fue un montaje, según ha concluido la investigación de la Ertzaintza. La supuesta víctima es hermano de uno de los ladrones. Según fuentes cercanas a la investigación, llevaba poco tiempo trabajando en la oficina. De hecho, no es empleado de la entidad financiera, sino de una Empresa de Trabajo Temporal (ETT) y estaba haciendo una sustitución. En colaboración con su hermano y un amigo, habría organizado el supuesto asalto para robar el banco..
Según ha informado este miércoles la Policía autonómica, las pesquisas policiales permitieron determinar pronto que el relato proporcionado por la víctima, y empleado de la sucursal, tenía «numerosas contradicciones», así como que el trabajador había incumplido el protocolo de seguridad de la entidad en varias ocasiones, lo que levantó las sospechas de los investigadores.
La investigación permitió identificar a los dos presuntos autores del asalto, dos hombres de 24 y 23 años de edad, resultando uno de ellos ser hermano del empleado bancario y víctima, y el otro un amigo de ambos.
Los agentes encargados del caso pudieron determinar que los sospechosos contaban con antecedentes policiales y que acudían a salones de juegos y apuestas con regularidad y a otros locales comerciales mostrando grandes sumas de dinero. Esta circunstancia, unida a otras evidencias que les situaban en el lugar de los hechos, han permitido su detención en las últimas horas.
En un registro practicado posteriormente en los domicilios de dos de los sospechosos se hallaron 11.050 euros pertenecientes al botín y una mochila y un guante utilizados durante el atraco.
Tanto los dos autores materiales del atraco, como el cooperador necesario, de 29 años de edad, fueron trasladados a dependencias de la Ertzaintza para realizar las correspondientes diligencias policiales. Una vez finalizadas los detenidos han sido puestos este miércoles por la tarde a disposición del Juzgado de San Sebastián encargado del caso.
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